Gambas en dos versiones / Gambes en dues versions

Uno de los grandes lujos de esta vida, para mi, es poderme tomar unas buenas gambas. Y ayer mi amigo J. me regaló una bolsa en donde había 8 buenas piezas con un aspecto que se te hacía la boca agua solo de verlas y olerlas.
Y como ya he dicho en otras ocasiones, me gustan los sabores simples, sin demasiadas complicaciones, así que aquí os pongo un par de maneras de hacer unas buenas gambas de la forma más simple pero deliciosa.

Al horno y en microondas.


Versión 1: Gambas al Horno.

Encended el horno a 180-200 aprox.
Sobre una bandeja para horno plana, poner un lecho de sal gorda, y salpicar con agua.

Colocar ordenadamente las gambas, no importa que estén apretadas pero no montadas.
Cubrir con otra capa de sal gorda y volver a salpicar con agua.
Introducir en el horno y dejar 10 minutos. Si son muy grandes, pueden necesitar 12 minutos.
Sacar y quitar la costra superior de sal.
El marisco no pierde nada de su jugosidad y toma la sal justa. No quedan saladas.
Además no hacen nada de humo en la cocina ni llenan la casa de olor como cuando se hacen a la plancha.

Versión 2: Gambas en Microondas.

En un recipiente plano y bajito, apto para microondas, poned unas gotas de aceite bien repartidas con un pincel. Colocar las gambas unas al lado de las otras, para que queden bien juntas pero sin amontonarse. Las pulverizamos con un spray de aceite o un pincel para que queden todas untadas. Salpimentarlas bien con sal y con pimientas recién molidas.
Tapar el recipiente con una tapa que encaje bien.
Cocerlas a potencia máxima durante 5 minutos. Y dejar reposar dos o tres minutos más dentro del microondas.
Se sabe que están cocidas porque han cambiado de color. Y si fueran muy grandes o no no estuvieran bien hechas se pueden poner un minuto más pero no suele hacer falta.

Se pueden servir con alguna salsa pero si queréis un consejo, Tomadlas así, en su propio jugo. Están deliciosas.

Las de la fotos, están hechas en el micro.